El otro día os contaba que la industria alimentaria sabe lo que queremos, sabe que queremos estar sanos, sabe que nos gusta hacer deporte y alimentarnos bien, pero queda poco sano y un poco feo, visualmente hablando, el salir de entrenar e irte a beber una cervecita.
Ellos que lo saben han dicho: -¡Pues nada! Ya está todo solucionado!
Se hizo el milagro y ya no hay remordimientos y queda muy bonito todo, ahora tenemos la cervecita Isotónica! ¿Cómo se te queda el cuerpo? Oye, que si ya me dicen que han sacado el Jamón Isotónico a mi me solucionan la vida! Es que me apunto al gimnasio solo para salir con mi plato de Jamón Isotónico con su cervecita Isotónica a recuperarme sin remordimientos ninguno!
Pues ayer me compré la revista "WomensHealth" con la que adivinar que venía de regalo... ¡Bingo! su respectiva super cervecita Isotónica!
Al llegar a casa la metí a la nevera sin más, junto a las otras 0,0.
Cuando Terrón abrió la nevera se quedó pensativo y sacó una cerveza 0,0 normal y la super Isotónica y se puso a leer ambas latas comprobando los datos (Todo se pega en esta vida).
Para su sorpresa (no para la mía) ambas estaban hechas con los mismos ingredientes, con la única diferencia de que, nutricionalmente hablando, la Isotónica tiene peores valores, más hidratos y más azúcar.
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